miércoles, 11 de febrero de 2009

“El arte es un arma cargada de futuro"

Con estas palabras termina Noviembre, la segunda película que dirigió Achero Mañas después de debutar con “El Bola”. En este film, Alfredo (Óscar Jaenada) junto a otros jóvenes actores, decide crear un grupo de teatro independiente llamado Noviembre, con un concepto de este arte algo diferente del convencional: para ellos, el teatro es una forma de comunicación que va más allá del escenario, debe ser un instrumento de comunicación entre los hombres para hacerlos mejores, para que se sientan vivos, un arte libre, un medio para cambiar la sociedad y con ella el mundo.
La película está rodada a modo de falso documental, manejando dos tiempos: en el presente los actores ancianos recuerdan con nostalgia el pasado, cuando comenzó Noviembre (a finales de los años 90). Todas las escenas de obras teatrales están rodadas en el exterior con una simple cámara digital, y el público que participa son personas reales, no actores; con esto se consigue un mayor realismo y espontaneidad.
El objetivo de Noviembre de acabar con un mundo individualista y materialista a través del arte dramático se plasma en un Manifiesto donde apuestan por la defensa de la autonomía creativa, la libertad, la independencia, la improvisación… un grito de protesta frente al conformismo y la supremacía del poder económico dentro del arte (trámites para conseguir permisos de actuación, burocracia y normas preestablecidas, etc.). Una actitud revolucionaria colmada de idealismo, considerada por algunos como utópica, especialmente por la decisión de actuar sin ánimo de lucro y únicamente en el exterior, además de negarse a adaptar obras ya creadas o a aceptar miembros que hayan tenido alguna relación con el mundo del teatro profesional. En Noviembre se nos muestra la originalidad como la única salvación frente al conservadurismo y el pensamiento único (con sus reglas que intentan homogeneizar todas las disciplinas artísticas, incluido el cine), se rebasan las fronteras de lo políticamente correcto hasta llegar a la insubordinación y a la ruptura de normas, tanto sociales como morales.
Al principio se dedican a lo que ellos mismos llaman “teatro popular”, que con actos provocativos y a veces perturbadores y soeces, busca la reacción del público anónimo (por ejemplo, una representación en la que se disfrazan de bebes-demonio que siembran el pánico por la calle… acabando en comisaría después de la obra). Con el transcurso de la película se puede apreciar un giro hacia un “teatro documental”, con obras de denuncia social e interpretaciones de papeles reivindicativos. En una de estas obras se intenta demostrar cómo las personas pierden el tiempo delante de la televisión, y en otra se pretende discutir la situación de marginación de discapacitados, drogadictos e indigentes hoy en día. Pero la más decisiva para Noviembre es la representación de “Atentado”, tras la cual son acusados de hacer apología al terrorismo, cosa que demuestra que en ningún momento les van a poner las cosas fáciles al grupo independiente.
Para Noviembre no hay censuras ni límites, sólo ideas y arte: todo vale para conseguir que el público pase de ser simples espectadores a formar parte de la representación. Por lo tanto, se nos plantea una importante reflexión sobre la capacidad de la comunicación (aquí entendida como arte dramático) para influir sobre la sociedad, para cambiar su posición, para conseguir que se asusten, se diviertan, rían o lloren. Además, se nos muestran tanto el teatro como el cine como un reflejo de la realidad, que pueden en ocasiones parecernos más verosímiles que la misma vida; por esto, nos propone una discusión sobre la ¿utópica? autenticidad del arte y por tanto de la comunicación.


http://www.youtube.com/watch?v=HiIoe0IEdTM&feature=related (tráiler Noviembre)
http://www.youtube.com/watch?v=9gZL7kEnlv0&feature=related (Manifiesto)





Nosotros creemos en un arte que sea capaz de cambiar los corazones de la gente...
Que les alegre, que les de fuerza... un arte que les haga sentirse vivos... un arte que llegue directamente al espíritu de todos los hombres, y al de todas las mujeres... un arte que los haga conscientes, que los mejore como personas... un arte universal, un arte sin fronteras ni religiones, sin razas... y creemos en él como en un arma, pero no un arma de fogueo, un arma de verdad, un arma que se pueda hacer oír, y que tiene que dar en el blanco...



LiDiA* Peralimonera

8 comentarios:

Rosana P. dijo...

Es una película genial porque invita a la reflexión e incluso a la momentánea creencia de esa utopía, y ese mundo idealista. Quizá el problema es que finalmente se acaba cayendo en ese mundo tan irreal como al fin y a cabo es el teatro convencional...un entorno trasnochado donde los personajes al fin y al cabo desean ser cambiados por esa irrealidad.
Sin embargo me encanta el riesgo de crear el teatro en la calle con todas sus ventajas y desventajas. Creo que ahí logra algo brillante.
¡Un saludo!

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo contigo. Al fin y al cabo, esta manera de ver el arte de momento no es más que una utopía, cosa que deja clara una de las protagonistas al final de la película cuando admite: "Queríamos cambiar el mundo y no lo conseguimos. Ahora, sólo intento que el mundo no me cambie a mi."

Anónimo dijo...

Había oido hablar de la película pero no he tenido la oportunidad de verla. Tengo que decir su contenido ha despertado mi interés y estoy totalmente de acuerdo. Creo que el arte es un arma muy poderosa mediante la cual se puede manifestar realidades y aunque podamos caer en ese mundo verosímil creo que es ese propio mundo el que, bajo ese " papel" de cada pesonaje y bajo ese "guión" teatral, se pueden esconder verdades que de una manera u otra pueden cambiar o al menos incitar a la reflxión de sociedades.

Kyoko33 dijo...

Esta película juega con la comunicación para provocar ciertas reacciones en el público.Lo que es la teoría Hipodermica.
Los personajes de esta historia, son actores que quieres hacer del arte una vía de comunicación potente, que haga llegar al publico mensajes y que los asimilen en un grado elevado como nunca el teatro les había hecho sentir, si lo consiguen o no, no lo sé, por que sólo he visto el trailer y obviamente no desvelan el final, ya que lo que dice la chica de que no han podido cambiar el mundo, puede ser solo el nudo de la historia y no el desenlace...

No se si consiguen convertir el teatro en un elemento comunicativo más poderoso de lo que fue tiempo atrás ,cuando este era la única vía de entretenimiento cuando no habia ni cine ni radio, y como sabemos el teatro fué utilizado por el gobierno e instituciones publicas para hacer llegar mensajes a la población de manera latente o discreta.Bueno, en total, que estos actores quieren llevar al límite el teatro, superar barreras comunicativas que cambien a la sociedad pero sabemos que eso es bien dificil, y quien sabe si la sociedad permite que ellos les cambien y les asimilen como una verdad.

VICTORIA Monserrat.

Anónimo dijo...

Indiscutiblemente una de las mejores obras cinematográficas y libros que he visto hasta ahora.
Impecable. Altamente sorprendido!
m2

SARA.D dijo...

Me encanta esta pelicula por unos minutos te hace desconectar de la realidad y sentir una lucha hacia la libertad y la comprension

Coatl S dijo...

Bravo por la recomendación, me uno a celebrarla :D

Anónimo dijo...

Acabo de ver la pelicula, me encanto su contenido y me desperto el interes sobre el teatro y la comunicacion para una reflexion en la sociedad. Excelente, saludos desde Arg.